Aunque pasaron casi once años sin cambios, desde junio de 2025 están vigentes nuevos lineamientos que regulan cómo se llevan a cabo las inspecciones laborales en México. El documento, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 11 de junio, sustituye a la versión anterior de 2014 y busca modernizar el trabajo de supervisión que realiza la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
Estas nuevas reglas aplican para todo el personal involucrado en procesos de inspección a empresas: desde oficinas centrales hasta representantes federales en los estados. El objetivo es claro: hacer más eficaces las visitas, responder mejor ante riesgos graves y fortalecer el cumplimiento de la ley en centros de trabajo públicos y privados.
¿Qué cambió en las inspecciones?
Según reporta la consultora Fiscalia, entre los ajustes más relevantes están:
- Tres tipos de inspección: aleatoria, por denuncia directa o por seguimiento. Todas deben registrarse en un sistema digital llamado SIAPI.
- Protocolos especiales: se deben usar procedimientos específicos en inspecciones sensibles, como las que involucran a personas vulnerables o servicios especializados.
- Medidas urgentes: si hay un riesgo grave para los trabajadores, el inspector puede ordenar suspender actividades, con autorización oficial en menos de 24 horas.
- Casos de fallecimiento: se establecen pasos claros para actuar cuando un trabajador muere en el lugar de trabajo, incluyendo notificar a la familia y proteger sus derechos.
- Verificación reforzada: los inspectores pueden ordenar nuevas visitas si hay reincidencias o accidentes graves, y deben revisar que los documentos entregados por las empresas sean auténticos.
- Subcontratación bajo lupa: se fortalecen los controles sobre el REPSE (registro de servicios especializados). Si una empresa no cumple, puede perder su registro.
- Uso obligatorio del Directorio Nacional de Empresas: sirve para planear mejor las inspecciones y no dejar fuera a sectores clave.
Más tecnología, más capacitación
Uno de los ejes más visibles de esta actualización es el uso de herramientas digitales para planear y documentar las inspecciones. Además, se crea un programa anual de capacitación especializada para el personal de inspección.
¿Qué significa esto para las empresas?
Los patrones deben estar más preparados para recibir una inspección. Tener en orden sus documentos, cumplir con las condiciones laborales que marca la ley y, sobre todo, no confiarse: ahora las inspecciones pueden ser más rigurosas y rápidas, incluso ante sospechas o denuncias anónimas.
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