
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha pedido separar el contexto político de las urgencias climáticas. En este contexto, ha criticado las “rivalidades estratégicas, conflictos armados que desvían la atención y agotan los recursos que deberían destinarse a afrontar el calentamiento global”.
“Estas fuerzas extremistas fabrican noticias falsas para obtener réditos electorales y perpetuar en las futuras generaciones un modelo que debería superarse y que nos muestra desigualdades socioeconómicas perpetuas y degradación ambiental”, ha señalado en su discurso en la sesión de plenaria de los líderes generales en la Cumbre del Clima (COP30), que comienza hoy en Belén (Brasil) y que se extenderá hasta el viernes 21.
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Asimismo, ha instado a superar la “falta de conexión entre los círculos diplomáticos y la realidad”. “La gente no comprende qué son las emisiones ni las toneladas métricas de carbono, pero todos conocen los efectos de la contaminación”, ha resaltado.
A juicio de Lula, el cambio climático es consecuencia de la misma dinámica que ha “fracturado” las sociedades durante siglos, “dividiéndolas entre ricos y pobres y separando al mundo entre países desarrollados y en desarrollo”. “Será imposible contener el cambio climático sin superar la desigualdad”, ha resaltado.
Los países vulnerables piden ampliar la ambición
Los países vulnerables, incluidas aquellas islas en la primera línea del cambio climático, han lamentado que muy pocos países hayan presentado sus planes de acción nacionales para reducir las emisiones (las conocidas como NDC por sus siglas en inglés, National Dtermined Contributions), según ha informado Bloomberg. Además, aquellas que sí que lo hicieron propusieron avanzar con demasiada lentitud.
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La presidenta de la República de las Islas Marshall y líder del grupo negociador de la Coalición de Alta Ambición, Hilda Heine, ha instado a Lula en una carta abierta a que garantice que la COP30 responda a la brecha existente entre los compromisos adquiridos por los países y lo que se necesita para controlar el aumento de la temperatura global.
“Es necesario un camino audaz para cumplir las promesas ya hechas y redoblar los esfuerzos para garantizar la seguridad de todos, tanto ahora como para las generaciones futuras”, ha afirmado en el texto.
A la Cumbre van a acudir menos de 60 presidentes, primeros ministros y otros funcionarios de alto nivel de los 190 países que han enviado representantes. De hecho, sólo se espera que hablen unos 20 presidentes, primeros ministros y miembros de la realeza durante este jueves y viernes, cuando se celebra la Cumbre de Líderes.
Entre las ausencias más notables estarán el presidente chino, Xi Jinping; el primer ministro indio, Narendra Modi; y el presidente estadounidense, Donald Trump, que evitará asistir a una conferencia destinada a abordar la crisis climática, a la que ha calificado de “estafa”. El 27 de enero se oficializará la retirada de EEUU del Acuerdo de París, un año después de que Trump tomara la decisión de hacerlo poco después de llegar a la Casa Blanca.
Combustibles sostenibles y protección de la selva tropical
En el marco de la COP30, se espera que Lula destaque su compromiso de cuadruplicar la producción de combustibles sostenibles para 2035, una iniciativa que podría impulsar el uso de combustibles líquidos de origen vegetal para propulsar aviones, barcos y automóviles. Según Bloomberg, esto supone una ventaja potencial para Brasil, potencia productora de etanol.
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Además, también se presentará una iniciativa de protección de la selva tropical prioridad del presidente brasileño. Sin embargo, las expectativas de financiación han caído por debajo de los objetivos iniciales. De acuerdo con diplomáticos veteranos, los líderes harán hincapié en la COP30 en la continua expansión de la energía libre de emisiones, sin dejarse desanimar por la retirada de EU de la diplomacia climática ni por los esfuerzos de otros países para reducir sus políticas ecológicas.
Asimismo, algunos de ellos detallarán también los beneficios concretos que se derivan de afrontar el cambio climático como los nuevos empleos, la mayor seguridad y las oportunidades económicas que se generan al trabajar para mitigar el calentamiento global y fortalecer la resiliencia ante los fenómenos meteorológicos extremos. Tal y como han indicado, su objetivo será reformular conceptos climáticos abstractos utilizando un lenguaje más accesible para un público más amplio.
Cortesía de El Economista
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