Mercado, pescadería, bar y restaurante japonés en un mismo lugar

Sobre Avenida Chapultepec suele haber caos vial y un transitar contínuo de personas, pero existe un portal hacia un pequeño Japón donde no solo te aíslas del bullicio, sino que los olores de la comida japonesa en CDMX, los productos frescos y el sake te envuelven en una atmósfera propia para consentir a los sentidos. Se llama Sakanaya James.

Desde la entrada notarás un pequeño mercado donde llama la atención la pescadería, con productos frescos muy socorridos en la comida japonesa: ostras, camarones, salmón, atún, pulpo. Observa cómo cortan los pescados y la calidad de cada uno.

El lugar está a cargo de Matsumoto Takeya, quien  adquirió experiencia trabajando como chef en hoteles y restaurantes de comida japonesa en Japón antes de mudarse a México. Posteriormente de trabajar en un restaurante de comida japonesa en México, abrió su propio restaurante llamado Izakaya Kura. Su pasión es buscar ingredientes deliciosos en diferentes regiones de México. Además, gracias a su linaje de pescadores en Odawara, tiene una habilidad excepcional para discernir la calidad del pescado.

Justo al lado de la pescadería verás la tienda de abarrotes japoneses en donde cada detalle está pensado para celebrar esta cultura: fideos, harinas, algas, arroz, condimentos, todo lo necesario para ir a casa y hacer tu propuesta de comida japonesa.

Aceptan pedidos en línea, así que si no ves algo, pregunta y tal vez lo tengan para otro día o para llevarlo a tu casa.

Pero no te quedes ahí, curiosea más al fondo porque verás la barra de un bar.

Bar japonés con sake y cerveza tradicional

Este bar es pequeño, pero excelente si vas de paso y quieres echar un trago rápido. Frente de ti verás una gran variedad de sakes que incluso puedes comprar: premium, desde junmai y ginjo hasta opciones artesanales. También whiskies japoneses como Hakushu y Yamazaki, cervezas (como Asahi y Sapporo) y cocteles que sirven ahí mismo o en el restaurante de arriba.

La recomendación es pedir el sake en la copa que va dentro de una cajita de madera llamada masu. Esto no es solo ornamental, cumple dos funciones; una es captar el sake que se derrame (porque te lo sirven al ras del vaso) y otra obedece a un ritual: el destilado que quede dentro de la caja es sinónimo de abundancia, por lo que al final debes beber lo que se derramó aceptando esa abundancia.

Si ya te echaste un sakecito, ya estás casi al 100% aquí en Sakanaya James.

Comida japonesa y barra de omakase

Sube las escaleras y verás una bandera típica de los barcos japoneses que transportaban mercancía hacia América. Observa las fotos antiguas en las paredes y ahora sí ve la mejor parte de este lugar.

Con una vista a Av. Chapultepec, está el restaurante. Un comedor tradicional con platos clásicos y creaciones de fusión inspiradas en el Pacífico mexicano. El menú aquí no es estático, pero todo está delicioso y es sumamente fresco; te decimos lo que más nos gustó.

Empieza con unos edamames, estos tienen un chilito que es una bienvenida perfecta a esta cocina con toques mexas.

Sigue con algunos nigiris: salmón, atún, cangrejo, tú eliges el sabor. Observa a tu alrededor y verás que hay mucha gente coreana y japonesa, eso es señal de que la comida aquí es tradicional.

Las ostras son algo imperdible, solitas está bien, pero las condimentan de tal forma que quedan aún mejor.

Si vas con hambre, puedes pedir el ramen o un curry. Los rollos de sushi no decepcionan, pero está más bueno arriesgarse por otros platos menos comunes. Hay incluso bandejas preparadas con varios platos, una comida completa que contiene una proteína, arroz, sopa miso y dos guarniciones.

De postre, lo que más nos gustó fue la tarta de marcha es suave y cremosa. Tienen también una de frutos rojos, camelado y mochis.

Justo al lado del comedor está la barra de omakase, podrás están en contacto directo con el chef y ver cómo se crea cada bocado.

Cortesía de Chilango

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