Con tan solo tener en su repertorio a personajes como Han Solo e Indiana Jones, queda claro que Harrison Ford es una leyenda del cine. A lo largo de sus seis décadas de trayectoria, se le ha visto participar en una larga lista de proyectos. Excepto en una de las películas más taquilleras de la historia.
Tras colaborar en 1981, Steven Spielberg convocó al actor para que interpretara a un nuevo personaje. El director de Rescatando al soldado Ryan quiso que Ford protagonizara una mega producción que, con los años, se convirtió en el pilar de una exitosa franquicia.
Al día de hoy, no podemos imaginar al Dr. Alan Grant si no es con el rostro del actor Sam Neill. Pero en 1993, el piloto del Halcón Milenario estuvo a punto de darle vida en la enigmática Jurassic Park.
Gracias a que se le asoció con tramas enfocadas a la aventura y ciencia ficción, Harrison Ford buscó adentrarse en proyectos con propuestas de mayor madurez. Así, rechazó la oferta del cineasta, según recoge Entertainment Weekly.
“Fui al departamento de arte y les pedí que hicieran una pintura fotorrealista de un T-Rex persiguiendo a Harrison y dos niños. Le envié la foto junto con el guión. Al día siguiente recibí una llamada y me dijo: ‘No es para mí, amigo’. Ese fue el final de la conversación”.
Steven Spielberg para Entertainment Weekly.
Al final, Jurassic Park logró alzarse a lo grande al superar los 900 millones de dólares de recaudación. Esto la convirtió en la cinta más exitosa en su año de estreno y la más taquillera de todos los tiempos en aquel momento.
En vez de enfrentarse a dinosaurios en el éxito de Spielberg, Ford optó por escapar de Tommy Lee Jones en El fugitivo. Aunque la película tuvo un buen recibimiento, nunca alcanzó los números ni el impacto de la franquicia jurásica.
Si gustas disfrutar de este clásico, puedes encontrar Jurassic Park, así como el resto de la saga, a través de Disney+ y Amazon Prime Video.
Cortesía de Xataka
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