“No se puede mover una planta de la noche a la mañana”: Volkswagen asegura no tener planes para salir de México

Volkswagen ha dejado claro que no tiene planes de trasladar su producción fuera de México, pese a la incertidumbre comercial en Norteamérica. Oliver Blume, CEO del Grupo Volkswagen, aseguró en la presentación de resultados anuales que la industria automotriz está altamente integrada entre México, Canadá y Estados Unidos, lo que hace inviable una relocalización apresurada. Ante los rumores sobre una posible presión del gobierno de Donald Trump para que los fabricantes trasladen sus operaciones a su territorio, el directivo subrayó que la compañía sigue comprometida con sus plantas en Puebla y otros puntos estratégicos.

La discusión se enmarca en el contexto de los aranceles del 25% que Estados Unidos podría imponer a las importaciones de automóviles y autopartes. Volkswagen, al igual que otros fabricantes, ha mantenido conversaciones con la administración estadounidense, pero no tomará decisiones hasta que haya claridad en las reglas del juego. Arno Antlitz, director financiero del grupo, reforzó este mensaje señalando que mover una fábrica no es una acción inmediata, sino un proceso que requiere años de planeación y miles de millones en inversión.

“No se puede mover una planta de coches y relocalizarla de la noche a la mañana o en un par de semanas”.

Arno Antlitz, director financiero del Grupo Volkswagen.

Además, Volkswagen ha apostado por la diversificación de su producción en Norteamérica. Mientras su fábrica de Puebla se consolida como un pilar clave en la manufactura de modelos como el Golf, en Canadá la compañía está desarrollando una planta de baterías en Ontario. Esta estrategia forma parte de una visión a largo plazo que busca fortalecer su presencia en la región sin depender únicamente de las condiciones políticas en Estados Unidos.

La relación entre Volkswagen y México no es nueva ni improvisada. Desde su llegada en 1954, la firma alemana ha convertido a Puebla en uno de sus centros de producción más importantes a nivel global. Con más de 7,000 empleados y una cadena de suministro que involucra a cientos de proveedores nacionales, su salida del país implicaría un golpe económico de gran escala. Además, la producción en México le permite a la marca mantener costos competitivos y acceso privilegiado a los mercados de Latinoamérica.

El futuro de Volkswagen en México no solo depende de factores políticos, sino también de su estrategia de electrificación. Con el auge de los vehículos eléctricos, la compañía ha decidido optimizar sus fábricas en Alemania para modelos de última generación, mientras mantiene la producción de algunos modelos de combustión interna en otras regiones. En ese sentido, la inversión en Norteamérica sigue en pie, con proyectos clave tanto en México como en Canadá.

Fábrica de motores Volkswagen en México.

Mazda, General Motors y Nissan piensan diferente

Las presiones comerciales de Estados Unidos ya han sacudido a la industria automotriz en México. Mazda ha sido una de las primeras en reconocer su preocupación, pues Miguel Barbeyto, director de la marca en el país, aseguró que están reevaluando su estrategia ante la falta de certeza sobre sus inversiones. General Motors también dejó ver que tiene la capacidad de trasladar parte de su producción si la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, no consigue negociar condiciones favorables para la industria. Mary Barra, CEO de la compañía, destacó que los aranceles podrían forzar cambios drásticos en sus planes de manufactura.

Nissan, líder de ventas en México por más de una década, tampoco descartó movimientos en su producción. Makoto Uchida, ex CEO global de la firma japonesa, advirtió que una imposición arancelaria del 25% a los vehículos fabricados en México podría obligar a la marca a replantear su presencia en el país. Sin embargo, parece que Volkswagen ha optado por una postura más firme, ya que asegura que su producción en Puebla y otros puntos estratégicos será clave para su operación en Norteamérica. En medio de la incertidumbre, la compañía alemana apuesta por la estabilidad y el largo plazo, desmarcándose de otras marcas que analizan mover sus fábricas a Estados Unidos.

Cortesía de Xataka



Dejanos un comentario: