- Autor, Alicia Hernández
- Título del autor, Enviada especial de BBC News Mundo a Ciudad del Vaticano
Robert Prevost, ahora León XIV, no estaba entre las grandes apuestas para ser el nuevo papa, así que cuando su nombre retumbó por los altavoces de la Plaza San Pedro, para muchos la alegría se unió a la curiosidad por saber de quién se trataba.
No es el caso de Guadalupe Tolentino.
“No sabíamos que sería él el nuevo papa, pero por supuesto todos los peruanos sabemos quién es, lo hemos visto”, nos cuenta.
Con su bandera de Perú en las manos, esta limeña dice “con el corazón lleno de emociones” que, cuando el difunto papa Francisco visitó su país, “el primer sitio al que fue era Chiclayo”.
Y es que es allí, en Chiclayo, una ciudad costeña de Lambayeque, en el norte de Perú, León XIV fue obispo de 2014 a 2023.
“La gente fue de viaje allá para verlo. Yo quise, pero no pude porque me implicaba dinero y tiempo, pero sabemos perfectamente quién es y su labor allá”, dice Guadalupe.
Pero además, Robert Prevost, nacido en Estados Unidos, pasó más de 40 años en Perú y, de hecho, tiene la nacionalidad peruana desde 2015.
“No teníamos ni idea de que sería él, había otros cardenales favoritos. Pero ahora, definitivamente todos esperamos que este nuevo papa rebase las expectativas que tenemos y que sea un buen sucesor de Francisco”, añade.
Tolentino lleva apenas un año en Roma.
Vino acá en busca de nuevas oportunidades y, mientras espera que se valide su título como docente, trabaja en la casa de una familia.
Pero lo que no esperaba era, como me dice, “haber tenido la oportunidad de presenciar este momento histórico” para Perú.

Fuente de la imagen, Getty Images
“De niña siempre decía que yo vería de cerca este humo blanco. Y mira, pues, tuve la dicha de presenciarlo a los 34 años. Agradezco a la vida por ello”.
Junto a Guadalupe está su hermana Ámbar, que sostiene orgullosa en sus manos una edición extraordinaria de L’Osservatore Romano, un diario del Vaticano, donde se lee “Robertum Franciscum Prevost que sibi nomen imposuit LEONEM XIV” y una gran foto del nuevo sumo pontífice.
Ambas llevan desde el pasado miércoles 7 de mayo, el día que inició el cónclave, apostadas en la Plaza de San Pedro a la espera de una fumata blanca.
La noticia de un Papa peruano, nos relata, lanza un gran mensaje.
“Esto, para el Perú y para mí es un mensaje de esperanza. No se lo esperaba nadie. Y, ¿sabes? Perú está en una situación muy complicada, muy crítica. Y creo que esto es un mensaje de esperanza para todos”.
Por esa misma situación crítica que relata, “por las extorsiones y porque no se apoya a los profesionales”, esta licenciada en negocios internacionales migró también a Roma hace apenas cuatro meses en busca de una vida mejor.
Un mensaje con “un castellano muy peruano”
León XIV es el primer pontífice originario de América del Norte y también el primero con ciudadanía estadounidense o peruana.
Durante sus años en Perú ejerció como párroco, docente de seminario, prefecto de estudios, juez eclesiástico y miembro del consejo consultivo de la Diócesis de Trujillo, además de encabezar el seminario agustino en esa ciudad durante una década. También integró entre 2018 y 2023 la Conferencia Episcopal Peruana (CEP).
“Estamos contentos y abrumados porque ahora somos famosos por un momento”, nos cuenta en la Plaza de San Pedro Rafael Aguilar, también peruano y ataviado con su bandera rojiblanca atada al cuello.

A su lado, Ela Fernández, también con la bandera puesta, nos dice que la noticia “implica para nosotros mucha fe, mucha esperanza, porque Prevost hizo una gran obra en Perú y seguirá con eso a nivel mundial”.
Ambos nos hablan emocionados porque “como peruanos y católicos, esto es un reconocimiento a un país que no es que la pase muy bien, siempre vamos de tirones en tirones”.
Durante parte de su primer discurso ya como Papa, Robert Prevost ha hablado en español.
“Un saludo a todos aquellos, en modo particular, a mi querida Diócesis de Chiclayo, en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo”.
Esto, además de ser algo novedoso, ha tocado el corazón de Rafael.
“Nos ha dedicado unas palabras, unas pequeñas líneas, palabras con un castellano muy peruano. Y que nos dedicara esas líneas, eso para nosotros fue como si hubiéramos ganado un campeonato mundial”, expresa con emoción Rafael.
Rafael y Ela vinieron expresamente a Italia para los días del cónclave, para ver de cerca la fumata blanca, “un momento en el que cual todos nos unimos, dejamos nuestro egoísmo y esperamos que haya un mundo mejor”.
“Luego saldremos a la calle, seguiremos siendo los mismos. Pero estos pequeños momentos son los que tenemos que priviliegiar”, recalca Rafael.
Aun así, es consciente de las limitaciones de la Iglesia.
Nos cuenta que es divorciado. Y esto podría ser un detalle menor, pero a aquellas personas que se divorciaron y luego se volvieron a casar, no se les permite comulgar, uno de los sacramentos dentro del catolicismo.
“Cuando me casé, sabía las condiciones. El Vaticano tendrá tiempo para incorporarse [a los nuevos tiempo], pero lentamente. Es muy difícil para la Iglesia católica cambiar. Pero Dios ama a todos por igual, sean divorciados o no, heterosexuales o gays, tengan o no dinero”, dice.

Fuente de la imagen, Getty Images
Expectativa por el futuro papado
Entre la alegría y emoción por el nombramiento de este nuevo papa, la gente se pregunta también si seguirá los pasos de Francisco. Un buen síntoma es que tuvo unas palabras para él en su discurso.
Aunque este, en parte, será un reto menor para León XIV.
La Iglesia con la que se encuentra está, como el propio panorama mundial, dividida en corrientes más reformistas y otras más conservadoras, un tira y afloja del que, parece, Prevost es ahora bisagra.
Un asunto que marcó tanto el papado de Benedicto XVI como el de Francisco fue el tema de los abusos a menores en el seno de la Iglesia. Y esto es de prever que continúe con el nuevo pontífice.
De hecho, Prevost fue acusado de no investigar las denuncias de tres supuestas víctimas de abusos sexuales en la Diócesis de Chiclayo, algo que tanto la diócesis como sus partidarios en Perú niegan enfáticamente.
Este es un tema espinoso particularmente en Perú, donde la influyente comunidad del Sodalicio acumulaba denuncias en su contra desde hacía años, hasta que el papa Francisco ordenó disolverla en una de las últimas decisiones de su pontificado.
Así, en esta nueva etapa como jerarca de la Iglesia, este será uno de sus principales retos.
Pero aún no es ni siquiera el día 1 del papado de León XIV.
Y los creyentes que se acercaron a la Plaza San Pedro, como Guadalupe, Ambar, Ela y Rafael, celebran a un nuevo papa al que ven cercano y que, para sorpresa y alegría de ellos, logró que Perú estuviera en boca de todo el mundo.

Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.
Cortesía de BBC Noticias
Dejanos un comentario: