El pasado viernes, en los pasillos del recinto parlamentario de San Lázaro, se vivió uno de esos episodios que retratan con crudeza la tensión política que aún hierve bajo la superficie de Morena. Todo comenzó cuando el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar tomó la palabra para apoyar la Ley de Ingresos que su jefa política, la presidenta Claudia Sheinbaum.
Su intervención, breve pero filosa, encendió el avispero. El priista Rubén Moreira subió al Pleno, mientras Elías Lixa, coordinador del PAN, interrumpió con groserías contra Ramírez Cuéllar. Detrás, el emecista Gibrán Ramírez -siempre dispuesto a la riña- lo secundó con más insultos contra el vicecoordinador de Morena.
El exdirigente de Morena fue respaldado por miembros de la bancada morenista, como Alejandro Peña, Irma Juan Carlos y Leonel Godoy. Pero se notó la enorme ausencia de la defensa del coordinador Ricardo Monreal. Ramírez Cuéllar representa a una fracción de diputados que no esconde su cercanía con Palacio Nacional, como no la tiene el zacatecano.
Inclusive, de tal tamaño fue la bronca que en los pasillos parlamentarios comienza a decirse que la embestida no fue espontánea, como lo pudo saber esta redacción. Detrás de esa coreografía de agresiones habría una alianza silenciosa entre la oposición panista, priista y emecista con el morenista Pedro Haces, coordinador de Operación Política de la bancada.
Desde esa posición que en el esquema de los órganos de dirección se ostenta por encima de las vicecoordinaciones de Ramírez Cuéllar, Gaby Jiménez y Dolores Padierna, el líder de la Catem busca mantener la influencia de su grupo sobre ciertos equilibrios internos con el fin de mantener a raya a los claudistas, los Puros y Duros de Morena a los que tanto detesta.
Pedro Haces se va al Super Bowl y hay malestar en la bancada de Morena
“No sé qué problemas tengan en Morena, resuélvanlos”, resumió la panista Margarita Zavala al tomar la palabra para contestar a Ramírez Cuéllar el viernes pasado. Sin embargo, este martes volvieron a mostrarse esas diferencias dentro del grupo parlamentario mayoritario por Pedro Haces. La diputada morenista Selene Ávila denunció ser víctima de violencia política en razón de género por parte de Monreal Ávila y Haces Barba.
Ávila Flores también se lanzó contra el líder de Catem por su insistencia en abrir espacios a los pactos de vieja escuela en San Lázaro, y lo acusó además de excluirla de la delegación mexicana que participó en la Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP) celebrada en Ginebra, Suiza. Lo anterior a través de un video en sus redes sociales.
“Llego aquí a Ginebra y me quiero registrar en el evento de la interparlamentaria y me dicen ‘No, usted no está confirmada en la delegación’. Les dije: ‘Yo formo parte del comité’. No me metieron. ¿Por qué? Porque soy rebelde”, dijo la legisladora federal identificada con el grupo morenista del secretario Marcelo Ebrard. “No seguiré callada. No soy florero”.
Cortesía de La Política Online
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