Tras el toque de queda que instauró la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, la policía local realizó este miércoles por la mañana las primeras detenciones de personas que desafiaron la imposición. La ciudad californiana lleva cinco días de manifestaciones contra la política migratoria del gobierno de Donald Trump.
La medida entró en vigor en la noche del martes y se mantendrá vigente hasta las 6 de la mañana del jueves, con el fin de “detener el vandalismo y parar los saqueos”, indicó la alcaldesa demócrata. Desde entonces, un grupo de 25 personas fueron arrestadas la última noche, según precisó el diario de Los Angeles Times. Los únicos que pueden circular con libertad son residentes, periodistas y servicios de emergencia, añadió.
Desde el viernes pasado, la segunda ciudad más grande de Estados Unidos, con una gran población de origen hispano, es escenario de disturbios entre los manifestantes que denuncian una razia contra los migrantes indocumentados por parte del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés). Trump calificó a los manifestantes como “enemigos extranjeros“.
En Texas se replicaron las protestas pacíficas de personas migrantes. Se trata de otro de los estados sureños del país norteamericano con una gran población latinoamericana. En este marco de enfrentamiento entre el Gobierno trumpista y los líderes del partido demócrata, el republicano Gregg Abbott, gobernador de Texas, ordenó el despliegue de la Guardia Nacional para enfrentar los supuestos disturbios.
“La Guardia Nacional de Texas será desplegada en distintos puntos del estado para garantizar la paz y el orden. Protestar pacíficamente es legal. Dañar personas o propiedades es ilegal y desembocará en detenciones”, escribió Abbott en su cuenta de X, y agregó que la Guardia empleará “todo tipo de herramientas“ para “mantener el orden”.
Del otro lado del espectro político, el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, convertido en una figura prominente de la oposición aTrump, denunció en su cuenta de X: “Desplegar en la calle a combatientes entrenados para la guerra no tiene precedentes y amenaza el mismo fundamento de nuestra democracia“.
En este sentido, Newson, considerado como un posible candidato a la Casa Blanca para 2028, añadió: “Donald Trump se comporta como un tirano, no como un presidente“, añadió.
“Invasores extranjeros”
En medio de su política ultraconservadora de expulsión de migrantes latinoamericanos, Donald Trump ordenó el despliegue en las calles de miles de miembros de la Guardia Nacional en Los Ángeles, pese a la oposición a esta medida por parte de las autoridades californianas.
La Guardia Nacional es una fuerza armada de reserva, que suele estar controlada por los gobernadores estatales, y se utiliza habitualmente en respuesta a desastres naturales. Estas fuerzas no eran desplegadas por un presidente contra la voluntad de un gobernador estatal desde 1965, en el auge del movimiento por los derechos civiles.
Al momento de dar la orden, Trump afirmó a las tropas en el Fuerte Bragg: “Lo que ven en California es un asalto a la paz, al orden público y a la soberanía nacional, llevado a cabo por alborotadores que portan banderas extranjeras con el objetivo de continuar una invasión extranjera de nuestro país“.
“Esta anarquía no continuará. No permitiremos que los agentes federales sean atacados y no dejaremos que una ciudad estadounidense sea invadida y conquistada por enemigos extranjeros“, declaró el martes Trump.
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Cortesía de Página 12
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