Si alguna vez pensaste que Adivina Quién era un juego de pura suerte, estás más cerca de la verdad de lo que imaginabas. Una publicación reciente en Reddit y un video de YouTube han cambiado todo lo que sabíamos de este juego de mensa. Un usuario, que se hace llamar Detective Joey G, creó una inteligencia artificial para analizar todas las combinaciones posibles del clásico juego y concluyó que la famosa estrategia de Mark Rober no es la mejor.
Según el video de Mark Rober, exingeniero de la NASA y youtuber de ciencia, la mejor forma de ganar en Guess Who? (nombre original de Adivina Quién) es usar preguntas que dividan al tablero en mitades más o menos iguales. Por ejemplo: “¿Tu personaje tiene gafas, pelo blanco o nombre que empiece con A-M?”. Esta táctica permite descartar muchos personajes en cada ronda. Con suerte, puedes reducir 24 candidatos a solo 1 en tan solo cinco movimientos.
Rober afirmó que al aplicar este método, se podía ganar el juego el 96% de las veces. Su planteamiento se basa en la idea de una búsqueda binaria, es decir, dividir el conjunto en partes iguales con cada pregunta para reducir la incertidumbre lo más rápido posible.
Detective Joey G le puso IA al juego y desarmó la teoría del 96%
Pero Detective Joey G, con mucho tiempo libre y una mente apasionada por las matemáticas, se dedicó a desmontar esta estrategia. Según su publicación en Reddit y su propio video, la táctica de Rober tiene errores importantes. Para demostrarlo, programó una inteligencia artificial que simula absolutamente todas las posibles combinaciones del juego y calcula, turno a turno, la mejor jugada disponible. Según el video de Detective Joey G, la clave está en combinar dos estrategias:
- Dividir en mitades razonablemente equilibradas al inicio.
- Pero en las últimas rondas, cuando solo quedan 2 o 3 personajes, es mejor arriesgar y adivinar directamente en vez de seguir preguntando.
Su IA demuestra que en una partida perfecta, el jugador que inicia (Jugador 1) gana el 55–56% de las veces. Y en una variante con “regla de misericordia” (cuando uno de los jugadores ya no tiene forma de ganar), la cifra sube al 66%.
La diferencia está en los finales: ahí es donde se pierde el juego
Según Detective Joey G, el error de Rober es suponer que el juego es simétrico todo el tiempo. Pero cuando quedan muy pocos personajes, seguir preguntando puede ser una mala idea, si tu oponente solo tiene una opción y tú tienes tres, él ganará en su próximo turno. Por eso, en esa situación lo óptimo es lanzar una conjetura, aunque suene arriesgado. Es literalmente una moneda al aire y es mejor que perder seguro.
La IA construida por Joey funciona como un árbol de decisión, un algoritmo que recorre todos los posibles estados del juego y decide cuál es la jugada más efectiva en cada caso. Usa programación dinámica para almacenar resultados de subpartidas y no repetir cálculos, lo cual le permite simular miles de combinaciones en cuestión de segundos.
Mark no es el único al que corrigieron: también otros matemáticos fallaron
En su publicación, Detective Joey G también menciona que otra persona ya había demostrado que la estrategia de Mark era incorrecta: LearnYouSomeMaths. Sin embargo, Joey encontró que incluso esa versión tenía fallos menores en la fase final del juego.
A esto se suma el trabajo del estudiante de doctorado Edward Mellor, que en 2020 también analizó la estrategia de Rober y concluyó que no era óptima. Según Edward Mellor, la división perfecta no siempre es lo mejor; si tu rival tiene ventaja, es preferible hacer una jugada agresiva, aunque arriesgada, para evitar perder. Mellor calculó que, en ciertos escenarios, adivinar directamente tiene más probabilidades de empatar o ganar que seguir con preguntas ineficaces.
¿Cómo funciona un árbol de decisión?
La inteligencia artificial que resolvió Adivina Quién se basa en una estructura conocida como árbol de decisión. Este tipo de algoritmo se utiliza para tareas de clasificación y toma de decisiones y divide los datos en nodos según atributos. En cada nodo se elige la mejor pregunta posible (la que más reduce la incertidumbre) y el algoritmo se ramifica según las respuestas posibles.
En el caso del juego, cada nodo representa una situación del tablero, cuántos personajes quedan para cada jugador y de quién es el turno. La IA evalúa qué acción es mejor (adivinar o preguntar) y calcula la probabilidad de victoria en cada camino posible. El proceso es recursivo y sigue el principio de “divide y vencerás”, al optimizar a toma de decisiones hasta alcanzar el resultado más probable de victoria.
Cortesía de Xataka
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