LA CRUDA REALIDAD DE LA FUERZA DE MORENA

Desde que López ganó la elección presidencial en julio del 2018 se inició una campaña mediática afirmando que Morena tenía una gran fuerza votante y por ello había ganado la presidencia de la República con 30 millones de votos. Y de ahí en adelante han continuado afirmando lo mismo, al ganar elecciones posteriores para gobernadores, sin que se destaque que en la mayoría de ellas ha predominado el abstencionismo. Aunque no es lo mismo una elección federal que una estatal o municipal.

Prueba de ello es que además de esa diferencia, los votos con que ganó López y Morena la elección presidencial en el 2018, que fue una elección federal, con 30 millones 113 mil 483 votos, para los procesos electorales también federales para diputados en el 2021 a la mitad de su sexenio, obtuvo 17 millones 180 mil votos, siendo una notoria diferencia de votos menos. 

Esa diferencia llevó a que López y su partido de familia no tuviesen el control total de la Cámara de Diputados y seguir aprobando Iniciativas que llevaran cambios a nuestra Constitución como lo hizo en los primeros tres años. Pero López y Morena siguieron presumiendo que Morena era una aplanadora 

Y así llegaron a las elecciones de Coahuila y el Estado de México para gobernador, donde Morena fue arrasado en Coahuila por la Coalición PRI-PRD-PAN, con 741 mil 731 votos, mientras que el candidato de Morena, que participo solo sin Coalición, obtuvo 275 mil votos. Siendo una gran interrogante, porque no fue en Alianza o Coalición como en el Estado de México.

En esa línea de no ser la “aplanadora” que presumen López y Morena, de las elecciones en Coahuila y el Estado de México nos muestra en un excelente análisis Enrique Quintana en su Columna “Coordenadas” de El Financiero publicada el 6 de junio del 2023, titulada Nada está definido: la ventaja de Morena fue de solo 1.5 puntos”, destacando que de los votos totales obtenidos por Morena en Edomex y Coahuila apenas son superiores a los de la alianza opositora.

Importante lo que presenta Enrique Quintana de su análisis al señalar que Morena tuvo una menor ventaja de la que parecía, dado que ya con los datos del PREP completos, se percibe que los votos totales obtenidos por Morena en las dos entidades apenas son superiores a los de la alianza opositora si no se consideran los del PT y el PVEM en Coahuila

En esa línea, Morena habría obtenido 3 millones 268 mil votos en el Estado de México y 280 mil en Coahuila, sumando 3 millones 548 mil votos. En tanto la Alianza del PRI-PAN-PRD logro 2 millones 752 mil votos en el Edomex y 742 mil en Coahuila, lo que en conjunto da 3 millones 494 mil votos totales.Es decir, considerando las dos entidades la ventaja para Morena resulta de solo 1.5 puntos porcentuales.

En cuanto a las Alianzas, Quintana nos comparte, sí son importantes, aunque en Coahuila si se hubieran agregado a los de Morena los votos del PT y el PVEM, la ventaja se habría limitado a un 8.7 por ciento.

En cuanto al Estado de México, analizando los votos por candidato, se detecta que el 17 por ciento del total corresponde al PVEM y el PT. Indicando que,sin esos dos partidos, el porcentaje obtenido por Delfina hubiera sido de 35 por ciento y hubiera perdido la elección.

El dato de lo que representó el 17 por ciento del PT y del Verde, lo agrego estimados electores para que sea más representativo, dado que el total de votos de Delfina Gómez fue de 3 millones 272 mil 106 votos, y menos el 17 por ciento que son 556 mil 258 votos, quedaría en 2 millones 715 mil 848 votos. En tanto Alejandra del Moral obtuvo 2 millones 755 mil 532 votos. Y si bien ambas candidatas fueron apoyadas por otros partidos, ni el PRI ni Alejandra del Moral presumían 20 puntos de ventaja, ni que arrasarían en las votaciones. Votaciones en las que solamente salió a votar menos del 50 por ciento de los 12 millones 739 mil 625 de la lista nominal.

Razón por la cual, para las elecciones federales del 2024, el hecho que Morena logre que el Partido Verde y el PT, sigan en Alianza será crítico e importante. Porque dados los resultados del 4 de junio del 2023, la capacidad de negociación de estos dos partidos con Morena se disparó.

Y continuando con su análisis, Enrique Quintana señala que los dos candidatos de Morena, sin el PT y el PVEM en Coahuila, que fueron aparte, lograron este año 48.9 por ciento de los votos totales emitidos, pero, en las elecciones estatales de 2022 fue del 50 por ciento. Lo cual indica, que retrocedieron, aunquehaya sido un poco.

Por otra parte, y respecto a la participación ciudadana en el Estado de México, Enrique Quintana destaca que fue baja, señalando que ni Morena ni la alianza PRI-PAN-PRD, consiguieron movilizar a los ciudadanos. Con referencia de los estimados de participación captados por el conteo rápido realizado por la autoridad electoral, poco más de la mitad de la población se quedó sin ir a las urnas. Agregando que, si, hubieran conseguido movilizar a un 5-10 por ciento adicional de la población mexiquense en municipios en los que hubo más votos para Alejandra del Moral, los resultados podrían haber sido diferentes.

Otro factor importante que menciona Quintana en su análisis, es la participación de los jóvenes en este proceso electoral, comentando que, de acuerdo con la encuesta de salida de El Financiero, apenas 21 por ciento de los votos emitidos fueron de jóvenes de entre 18 y 29 años, siendo que representan aproximadamente el 27 por ciento del padrón. Mientras que el 38 por ciento de los votos emitidos fue de personas de más de 50 años, que son el 34 por ciento del padrón. Por lo cual, si la alianza opositora hubiera movilizado en mayor medida a los jóvenes, quizá la diferencia en el resultado final hubiera sido menor.

Y concluye Enrique Quintana su análisis con los siguientes cuestionamientos: ¿Quiere Morena aumentar sus posibilidades de triunfo en 2024? Debiera asegurar que MC no presente candidato y amarrar el respaldo del PT y del Verde.

¿Quiere la alianza opositora competir seriamente por el triunfo? Necesita asegurarse que MC presente candidato. También debe buscar que las fisuras al interior de Morena se conviertan en fracturas y conseguir que ese candidato o candidata conecte realmente con los ciudadanos.

Que importante este análisis porque como lo he venido señalando en la Columna estimados lectores, nos aportan datos e información de que realmente Morena no es la “aplanadora” que tanto nos presume López y su líder nacional Mario Delgado, sobre todo cuando ambos ya hacen cuentas alegres de lo que van a ganar en las elecciones del 2024, nuevamente la presidencia de la República, y por ello el 9 de mayo del 2023, anunció que basados en su Plan C de la llamada cuarta transformación, será para ganar la mayoría calificada en el Congreso de la Unión. Haciendo un llamado de México a votar en bloque por el proyecto de país que encabeza, en las próximas elecciones de 2024, y con ello lograr reformas a la Constitución federal que son fundamentales para el cambio, entre ellas la reforma al Poder Judicial.

Señalando que para poder reformar la Constitución se necesitan 334, de 500 diputados, “primero tener la mayoría en el Congreso, mayoría calificada. Que cuando se vaya a votar se piense en eso: si se está contra el clasismo, el racismo, la corrupción, que se piense, a la hora de votar, que sea no sólo para el presidente o la presidenta. Parejo, porque si se tiene el triunfo en la Presidencia –como ahora, ganamos la Presidencia, ganamos la mayoría en el Congreso–, pero como no se tiene dos terceras partes en el Congreso se han dedicado a bloquearnos, y ahora con la complicidad de un poder faccioso al servicio de la corrupción, que es el Poder Judicial”.

Lo anterior hace más importante el análisis de Enrique Quintana y donde será muy importante que en el 2024 la realidad ponga a cada quien en su justa dimensión. A Morena que sin PT y el Partido Verde no será tan “aplanadora” como presumen. Y a la hoy oposición PRI-PAN-PRD, en que tengan un candidato que logre convencer a los ciudadanos a votar por él y tanto o más importante, logre convencer a ese enorme número de abstencionistas, que sin lugar a dudas inclinarían la balanza para que Morena y sus aliados no sigan destruyendo a México como lo han hecho desde el 1 de diciembre del 2018. 



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